sábado, 25 de junio de 2016

RESEÑA: Cuando Hitler Robó el Conejo Rosa

                                                                                                                                                                                                                                                         TÍTULO: Cuando Hitler Robó el Conejo Rosa.
AUTOR: Judith Kerr
TÍTULO ORIGINAL: When Hitler Stole Pink Rabbit
EDITORIAL: Alfaguara
AÑO DE PUBLICACIÓN: 1978
Nº DE PÁGINAS: 262









Berlín, año 1993.
Las elecciones se acercan y Adolf Hitler, está causando un gran furor en la sociedad, consiguiendo llegar al poder fácilmente.
Ese mismo año, se convirtió en una época de inmigración de los judíos, por lo que Anna (la protagonista de esta historia), junto con su hermano mayor Max y sus padres, huirán a Zúrich para evitar la terrible represión de Hitler y el mortal ambiente del campo de concentración, abriéndonos así los ojos, a una sociedad cruel no tan remota.




Hacía unos meses que nunca había oído hablar de este libro ni de su autora. Tampoco, no es que estuviera buscando nada de una temática similar: historia, drama, superación, inmigración o la entrada a la adolescencia, entre otras cosas que tardaría en numerar.
Sin embargo, Cuando Hitler Robó el Conejo Rosa, "aterrizó" en mis manos nada más y nada menos por una simple recomendación escolar.
Tengo que reconocer que no estuvo nada mal, aunque tampoco me logró impresionar tanto como otras fantásticas obras que también llegaron a mis manos como La Ladrona de Libros, El Diario de Ana Frank, El Niño con el Pijama de Rayas, El Mago de Hitler o incluso, El Príncipe de la Niebla (el cual, a parte de combinar amor y misterio, está ambientado en aquella época) hace aproximadamente un año.
Así, comparándolo, este libro comparte determinadas particularidades con las obras anteriormente nombradas y además, también cuenta con detalles originales que convierten el libro en una lectura placentera y nada despreciable para cualquier lector que se le presente la oportunidad de conseguirlo.
A pesar de esto, pienso que Cuando Hitler Robó el Conejo Rosa no se ha tratado en este caso de una lectura trepidante ni ninguna de esas obras maestras que encuentras pocas veces en tu vida que te atenazan a sus páginas selectas, llenas de belleza y de un excelente cuidado en su vocabulario y forma de expresión, que te emocionan en todo momento.
Por otra parte, en ocasiones me he sentido identificada con ciertos personajes como con Anna, uno de los personajes que más me ha llamado la atención, por su carácter y la cual experimenta un enorme y súbito salto de la infancia y total madurez. Unos saltan antes y de manera forzada por el ambiente y modo en el que viven su día a día. Otros, saltan más tarde, por el miedo a adquirir ciertas responsabilidades y por dejar de jugar y disfrutar de su infancia.                                                   He podido ver que Anna tenía ciertos intereses y maneras de pensar diferentes de los que una chica de su edad (1o u 11 años), podría tener.                                 Anna pensaba como una adulta: en salir adelante y en encontrar una vida mejor sin ningún tipo de problema, como a alguien al que un dictador le había arrebatado su infancia y sus múltiples motivos para sonreír, para reír. Para soñar...
Ahora, volvemos a tener un problema crítico en nuestra sociedad: el racismo  y la no aceptación por parte de los demás.
¿Por qué hay que rechazar o apartar a alguien por ser de otra religión diferente de la nuestra?  ¿Por qué hay que culpar a alguien de nuestros problemas por tener otra manera de pensar diferente a la nuestra? ¿Es que hay alguien superior a otro, dios mío?
NO.
Eso nunca ha sido así, por muchas veces que lo neguemos.
Son duras e inexplicables las barbaries y genocidios que se han producido a lo largo de nuestra historia. Han sido muchos los judíos e incluso, personas de otras religiones y pensamientos políticos diferentes a Hitler, que han muerto gaseados y exhaustos. Exhaustos de no ser tratados como se lo merecían y de haber sido expuestos a duros trabajos sin descanso alguno.
¡Y lo peor de todo es que a estas alturas, señores, aún sigamos siendo un poco racistas e injustos con esas personas!
Todos somos iguales a pesar de nuestras diferencias y eso..., siempre habría de tenerse muy claro: las diferencias son lo que nos hacen ÚNICOS e inigualables.
Y hay que respetarlo, no infravalorarlo.
7
¡UNA OBRA MUY RECOMENDABLE!
Y VOSOTROS, ¿YA HABÍAIS LEÍDO EL LIBRO?
¿QUÉ OS PARECIÓ?
Ahora os dejo una serie de información adicional para los más curiosos:
  • Primero, os dejo una entrevista a Judith Kerr, la autora de esta novela, para que conozcáis más sobre ella:



  • En segundo lugar, si os ha llamado la atención este libro y os gustaría leer algo del mismo tema, aquí os dejo un enlace con reseñas hechas por mí de novelas que he leído:

También, si queréis, podéis consultar reseñas sobre la Guerra Civil Española, por si disfrutáis leyendo sobre la historia de nuestro país:

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